"VIDAS PRESTADAS" DE ISABEL ÁLVAREZ

‘Vidas prestadas’ de Isabel Álvarez

I Premio Ángeles Martín de novela corta

Después de la entrevista a Isabel Álvarez por otra de sus obras, que podéis visitar en este mismo periódico, me quedé con las ganas de leer su obra ‘Vidas prestadas’, de la Editorial Adeshoras, que fue ganadora del I Premio Ángeles Martín de novela corta.

¿De qué trata la novela? 

Germán, el protagonista de la historia, regresa a la casa familiar ubicada junto a un acantilado, tras dos décadas de ausencia, para poder despedir a su madre.

La pregunta que seguro que, os haréis ahora es: ¿Por qué se fue Germán?

Si bien la discapacidad de su hermano Goyo condiciona de forma trágica la convivencia familiar, hay más motivos.

Vamos a ver un poquito del contenido de esta interesante novela. Comienza de la siguiente forma:

‘Pasaron muchos años antes de que se me ocurriera que la solución era el acantilado. Siempre había sido mi lugar, el sitio al que acudía para pensar, para llorar, para gritar mi rabia y desesperación al vacío que se abría bajo mis pies, para hacer planes cuando vislumbraba un atisbo de ilusión y de esperanza. El acantilado era también donde llevaba a Goyo los días en que no sufría una crisis y le apetecía dar un paseo’.

¿Dónde vivían?

En una vivienda aislada azotada por vientos inclementes. Cerca del acantilado.

¿Por qué se fueron a vivir allí?

La madre de Germán escogió aquella morada apartada, para que los vecinos no pudieran oír y quejarse de los golpes en las paredes o de los gritos de Goyo cuando tenía un ataque, así como que no pudieran sentirse tentados de intervenir ante la violencia del padre de Germán.

¿Qué encuentra Germán a su regreso?

Una casa devastada y a su hermana Marta al borde del abismo, ya que ella fue la que se encargó del cuidado de sus padres y de su hermano Goyo.

¿Qué hecho hizo que Germán estuviera todo el tiempo alerta cuando vivía allí?

Su padre estuvo a punto de estrangular a su madre y él intentó impedirlo, acabando en el suelo encajando una ‘lluvia de patadas’ de su padre. Germán quería impedir que cualquier día ocurriera algo irreparable.

¿El padre pegaba a todos?

Sólo Goyo escapaba a sus palizas.

Esta novela que contiene unas descripciones detalladas rozando, a momentos, lo poético, a pesar de tratar temas fuertes y delicados, cuida en todo momento el lenguaje, siendo dicha riqueza, un placer inmenso el adentrarse en cada una de sus páginas.

Germán encuentra a su hermana Marta, al morir la madre, recia y compacta, lejos de la niña escuálida y nerviosa que había dejado atrás.

Encuentra la casa con muy pocos muebles, debido a que han tenido que venderlos para poder sobrevivir, ya que a la madre, al morir el padre de Germán, le había quedado una pensión muy pequeña.

¿Qué pasó con Goyo al morir su madre?

Marta consiguió una plaza en una residencia de discapacitados en la ciudad.

Germán le reprocha a Marta que haya trasladado a Goyo a una residencia. Marta entonces se indigna, exponiendo:

‘En primer lugar, hice lo que había que hacer, lo que mamá y papá no tuvieron cojones de hacer en su día para darnos una oportunidad como familia.

A partir de ese momento, a lo largo de la novela se van viendo todas las cosas sucedidas cuando ellos vivían juntos y los hechos que se producen a su vuelta.

Espero que este artículo sirva para que leáis esta novela corta, que tiene en su interior emociones a raudales.

                                                                                 Juana María Fernández Llobera